Su seguridad es siempre una prioridad. Es por eso que las alarmas contra incendios, los detectores de humo, los detectores de gas y los detectores de monóxido de carbono son cruciales para garantizar que tenga un espacio seguro las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Sin embargo, muchas personas no entienden la necesidad de ciertos detectores y lo que hace cada uno. Cuando se trata de detectores de gas natural y monóxido de carbono, comprender la diferencia lo ayudará a saber qué hacer cuando se active una de estas alarmas, manteniendo su hogar más seguro y brindándole más tranquilidad.
Gas natural frente a monóxido de carbono
El monóxido de carbono (CO) es un gas inflamable incoloro, inodoro e insípido que es ligeramente menos denso que el aire. El CO es venenoso para inhalar y, en altas concentraciones, causa problemas de salud. La fatiga, el dolor de cabeza y la dificultad para respirar son los primeros síntomas de la exposición; las concentraciones más altas y el aumento de la exposición pueden ser fatales.
A diferencia del monóxido de carbono, el gas natural es un combustible fósil, no un subproducto de la quema del combustible, lo que lo convierte en una opción más limpia para la generación de energía. Como resultado, el gas natural es mejor para el medio ambiente. Está hecho principalmente de metano y otros compuestos como etano, propano, butano y pentano. Dado que el metano constituye la mayor parte del gas natural, ocupa la mayor cantidad de espacio posible, expulsando el oxígeno cuando escapa a un espacio. El gas natural también es naturalmente inflamable y explosivo, su principal peligro. El gas natural puede ser tan mortal como el monóxido de carbono si no se manipula correctamente.
Pero tener un detector de gas natural y comprender las señales de advertencia lo mantendrá a salvo.
¿Qué hace un detector de gas natural?
Invertir en un detector de gas natural o combustible es esencial para garantizar la seguridad de los hogares y las personas, ya que las fugas de gas natural pueden provocar incendios, explosiones y otros peligros. Estos dispositivos están diseñados para detectar la presencia de gas natural, comúnmente utilizado en los hogares para calefacción, cocina y otros fines. Un detector de gas natural funcionará con baterías o se conectará a la pared. Se instalarán detectores de gas natural para monitorear las partículas en el aire y alertar al propietario cuando esté en peligro de una fuga de gas natural.
Estos detectores de gas en el hogar funcionan monitoreando continuamente el aire en el área circundante para detectar la presencia de gas natural. Cuando las partes por millón (PPM) del gas natural alcanzan más de cinco, el sensor alertará a las personas cercanas al peligro potencial. Como los detectores de gas natural están fabricados con una sensibilidad avanzada, por lo general recibirá una advertencia antes de que pueda oler una fuga de gas natural. Esto le da al propietario tiempo adicional para corregir la fuga de gas natural antes de que se considere peligrosa.
¿Qué hace un detector de monóxido de carbono?
Los detectores de monóxido de carbono son un dispositivo de seguridad esencial para cualquier hogar o edificio donde se utilicen electrodomésticos o equipos que queman combustible y pueden salvar vidas al proporcionar una advertencia temprana de niveles peligrosos de CO. Los detectores de monóxido de carbono hacen sonar una alarma cuando detectan una cierta cantidad de monóxido de carbono a lo largo del tiempo. Diferentes sensores activan diferentes tipos de alertas, tales como:
- Sensor biomimético: un gel cambia de color cuando absorbe monóxido de carbono, lo que activa la alarma.
- Semiconductor de óxido de metal: cuando el circuito del chip de sílice detecta monóxido de carbono, reduce la resistencia eléctrica y este cambio activa la alarma.
- Sensor electroquímico: los electrodos en una solución química detectan los cambios en las corrientes eléctricas cuando entran en contacto con el monóxido de carbono, lo que activa la alarma.
Una vez que suena la alarma del detector de monóxido de carbono, debe estar en un ambiente libre de monóxido de carbono para silenciar la sirena. Los detectores de monóxido de carbono no detectarán gas natural, ya que el monóxido de carbono y el gas natural son dos tipos diferentes de gases.
Por qué deberías tener ambos
Los detectores de gas natural y monóxido de carbono benefician a su hogar, y ambos son necesarios, ya que sirven para diferentes propósitos. Tener ambos tipos de sensores en su hogar puede ayudarlo a detectar posibles peligros de manera temprana y tomar medidas para evitar daños. Y si es dueño de un negocio y busca proteger su lugar de trabajo contra estos peligros, también debe tener ambos tipos de equipos.
La detección temprana de peligros potenciales y la adopción de medidas para evitar daños es más fácil cuando se cuenta con los detectores adecuados. Es fundamental instalar detectores residenciales de gas natural cerca de los aparatos a gas, como hornos, calentadores de agua, estufas y secadoras, y detectores de monóxido de carbono en los dormitorios y otras áreas para dormir, así como en las áreas donde se utilizan aparatos a gas. Las pruebas y el mantenimiento regulares de los detectores de monóxido de carbono y gas natural pueden ayudar a garantizar que funcionen correctamente y proporcionen lecturas precisas.
Tener detectores de gas natural y monóxido de carbono en su hogar puede ayudarlo a protegerse a usted y a su familia de los peligros de las fugas de gas y el envenenamiento por monóxido de carbono.
Comuníquese con nosotros para averiguar cómo DeNova Detect puede ayudarlo a protegerlo a usted y a sus seres queridos.
Dejar un comentario
Este sitio está protegido por hCaptcha y se aplican la Política de privacidad de hCaptcha y los Términos del servicio.